Hoy venimos a reafirmar con unos sencillos consejos algunos de los temas ya tratados en Nutrición y Vida Sana en este blog:
El secreto está en los hábitos cotidianos:
- DESAYUNO: Un desayuno abundante, rico en hidratos de carbono de absorción lenta, es fundamental para empezar el día con energía y ganas. Puede estar compuesto, por ejemplo, por dos o tres rebanadas de pan integral con aceite de oliva, una o dos piezas de fruta y leche de almendras. Algunos expertos recomiendan comer huevo -especialmente la yema- en el desayuno.
- INGESTAS FRECUENTES: Dejar pasar demasiado tiempo entre comida y comida provoca indeseables bajadas y subidas del azúcar en la sangre. Cada tres horas debería comerse un alimento capaz de reponer parte de la energía perdida. Las frutas, los crackers y los frutos secos son tentempiés ideales.
- AGUA, un estudio realizado en el Reino Unido comprobó que la principal diferencia entre las personas que afirmaban sentirse animadas y las desganadas era el consumo de agua. El cansancio es el principal síntoma de una deshidratación leve que pasa desapercibida. Se evita bebiendo un vaso cada dos o tres horas. Las personas animadas también comen más alimentos vegetales, especialmente frutas y pescado azul. Además, hacen ejercicio y duermen lo suficiente.
Fuente: Revista Integral
Lo del desayuno es fundamental.Hay que tener en cuenta que pasan muchas horas entre la cena y el desayuno y el cuerpo necesitará abastecerse de nuevo.
Queso fresco desnatado o fiambre pavo son otras buenas opciones para la media mañana acompañando a algo de fruta.
Gracias por la aportación, Aloe!!! 🙂
Un saludo