Muchos pensaban que este día nunca llegaría, ya que esta enfermedad es un flagelo muy poderos y dañino, que es considerado como una de las problemáticas más peligrosas de todo el siglo XX. Sí, el Sida se ha cobrado muchas vidas desde que se lo descubrió (su “era” comenzó “oficialmente” el 5 de junio de 1981, al anunciarse unos extraños casos de neumonía en Los Ángeles, casos a partir de los cuales se empezó a investigar más acerca de este tipo de afección), y a pesar de haberse logrado muchos avances científicos para mejorar la calidad de vida de los pacientes que viven con este síndrome de inmunodeficiencia adquirida, aún no se había llegado al momento de poder anunciar un fármaco que pudiera convertirse en el freno de esta enfermedad.
Pues bien, parece ser que un grupo de investigadores ha llegado a este feliz suceso, luego de mucho tiempo de pruebas y búsqueda, y han diseñado un medicamento especial que sería capaz de producir una especie de “muro” entre el virus del sida y las células del cuerpo. De esta manera se evitaría la infección de las mismas, llegando de esta manera a uno de los acontecimientos científicos más grandes de la humanidad. Este fármaco estaría diseñado a partir de una proteína producida por el cuerpo humano, y su desarrollo masivo lograría acabar con la total impunidad con la que contaba hasta este momento el virus para llevarse consigo miles de víctimas.
Las pruebas que avalan a este nueva nueva medicina se han realizado sobre una muestra de 18 personas infectadas con el virus, y los resultados han sido sorprendentes, ya que se logra neutralizar el virus con solamente algunos mínimos efectos secundarios.
Uno de los continentes que podría verse más beneficiado con esta maravillosa noticia es el africano, ya que es el más afectado por la enfermedad; sin embargo, el hecho de haberse invertido mucho tiempo y dinero en la investigación hará seguramente que el tratamiento en base a este medicamento sea extremadamente caro, por lo cual una ve más el factor económico será el más importante a la hora de salvar vidas.
