Congestión nasal: prevención y remedios naturales

Tener la nariz congestionada no es una dolencia o enfermedad en sí misma, sino que es un un síntoma asociado a enfermedades comunes tales como gripes, catarros, resfriados, sinusitis, rinitis, alergias, etc.

Pero la congestión nasal no es, contrariamente a lo que se suele pensar, el resultado de la acumulación de mucosidad en la nariz. Se produce cuando las fosas nasales se obstruyen debido a la inflamación de los tejidos, provocada por la acción de virus y bacterias o bien por la aparición de alergia.

Uno de los mejores remedios naturales que existe es la utilización de hojas de eucalipto para hacer vahos (calentando agua con las hojas dentro y respirando por la nariz los efluvios que salen). Así conseguiremos despejar considerablemente esa molesta congestión. Lo mismo se puede decir de la manzanilla usada de manera idéntica.

No obstante, lo mejor es la prevención. Algunos consejos para ello son los siguientes:

• Seguir una dieta rica en vitamina C.

• No fumar.

• Buena higiene de manos.

• Usar, en la medida de lo posible, pañuelos deshechables.

• Tener cuidado con los cambios bruscos de temperatura, sobre todo en las estaciones frías a primera hora de la mañana.

• Ante los primeros síntomas utiliza algún remedio casero de los que hemos expuesto o algún inhalador que alivie la congestión antes de que vaya a más.