Primeros auxilios para lesiones deportivas

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A raíz de los comentarios de la entrada que hice hace varios días sobre consejos para el gimnasio, se me ocurrió continuar con primeros auxilios en caso de lesiones y medidas para prevenirlas (como comentabais, a veces se fuerza en exceso el cuerpo y luego pasa factura).Espero disfrutéis el artículo, como es largo lo puse en More o continua leyendoContinúa Leyendo (un poquito más abajo)

Fundamentos

  • Los primeros auxilios son una medida provisional para alejar el peligro, no constituyen un tratamiento.
  • Los primeros auxilios deben estar dirigidos a lo que se supone más grave. Ejemplo: cuando alguien recibe una patada en la pierna con la consiguiente lesión, no deberá pensarse que -sólo- se trata de una contusión sino que podría tratarse de algo más grave, una fractura ósea por ejemplo.
  • Los primeros auxilios nunca deben ser perjudiciales.
  • La tranquilidad y serenidad son de gran ayuda para el accidentado; el nerviosismo y la inseguridad constituyen una amenaza y un temor más, y existe el peligro de que se produzca una situación de shock.
  • Todo el mundo está legitimado para prestar primeros auxilios, pero conviene que sean realizados, siempre que sea posible, por una persona cualificada que goce de la confianza del accidentado. En este sentido, al tutor, entrenador o maestro les corresponden funciones extraordinariamente importantes. Cualquier otro tipo de tratamiento solo podrá ser aplicado por un médico.
  • Primero observar, luego actuar: El margen de maniobra puede ser extraordinariamente corto en las lesiones graves acompañadas de trastornos respiratorios y cardiocirculatorios. Cuando el aporte de oxígeno al cerebro se interrumpe durante un máximo de tres minutos, en la mayoría de los casos es posible la reanimación sin que se produzcan trastornos permanentes. Sobrepasado este tiempo, probablemente se producirán daños irreversibles aunque se logre la reanimación, y pasados cinco minutos la renanimación será infructuosa ya que se producirá la muerte biológica.

Medidas de prevención:

Si se conocen las causas de las lesiones provocadas por accidentes deportivos y las sobrecargas posibles de cada disciplina, es posible el que se puedan evitar muchos riesgos susceptibles de afectar la salud del deportista. A tal fin, entre las medidas que cabe adoptar pueden atarse las siguientes: fijarse, por parte del deportista, una conducta que reduzca las posibilidades de lesión, someterse a entrenamiento en áreas con elevado nivel de seguridad, observar escrupulosamente las indicaciones del instructor, el director de prácticas y el entrenador. Un tratamiento médico en el momento oportuno y una revisión sanitaria periódica constituyen factores que ayudan a evitar graves lesiones y a prevenir ulteriores afecciones crónicas.

Aptitud para el deporte: En primer lugar debe tenerse la seguridad de que, en todos los casos quien practica un deporte se encuentra en perfecto estado de salud.
Con relación a este punto cabe formular cuatro preguntas merecedoras de consideración:

  1.  ¿Se ajusta la constitución corporal del deportista a la disciplina escogida?
  2.  ¿Se adapta la edad del deportista a las exigencias del entrenamiento elegido?
  3. ¿Se halla la columna vertebral del deportista en condiciones de soportar la especialidad elegida sin correr riesgo alguno?
  4. ¿Son las articulaciones del deportista en general o algunas en especial aptas para la práctica del deporte elegido sin correr riesgo de lesión?

Nivel de entrenamiento: A través de una preparación adecuada, el deportista dotado de una capacidad motriz óptima en ámbitos tales como la coordinación, la agilidad articular, la fuerza, la rapidez y la resistencia, no sólo será superior cuando se trate de competir sino que si comete alguna torpeza en un terreno más limitado como es el personal, será asimismo menor el riesgo de que sufra alguna lesión.

Preparación y regeneración: Es muy importante realizar un precalentamiento adecuado antes de comenzar cualquier actividad deportiva, así como ejercicios de estiramientos y vuelta a la calma al terminar.

Alimentación: Hay que cuidar también la alimentación en función del tipo de entrenamiento que se vaya a realizar, haciendo un especial hincapié en lo importante de la hidratación. Sobre todo en épocas de verano se debe beber mucha agua y bebidas isotónicas.

Equipamiento protector: Según la actividad física a realizar, utilizaremos ropa y complementos especializados (rodilleras, coderas, calzado adaptado)  y, en general, utilizaremos siempre ropa cómoda y adecuada para prevenir lesiones, caídas o tirones.

Preparación psicológica: No menos importante es tener en cuenta este factor, ya que si bien un espíritu competitivo es bueno hasta cierto punto, en ocasiones puede jugar malas pasadas y hacernos forzar en exceso nuestro cuerpo y lesionarnos.

7 comments

  1. Me parece importante la diferencia que señalas entre estar legitimado para dar los primeros auxilios y estar cualificado para ello. Por querer ayudar muchas veces se empeora la situación del lesionado o herido.

    Los héroes, en el cine.

  2. Así es, Aloe 🙂

    Gracias por comentar

  3. hola oyes como puedo evaluar una lecion?

  4. Hola felicidades por el sitio.
    Hace una semana me cai jugando baloncesto y me disloque el brazo y mis compañeros ni yo sabiamos que hacer hasta que un amigo mio se animo a ayudarme. Es bueno aprender primeros auxilos para esta clase de situaciones.

  5. am me parece bien k haiga paginas sobre este tema bueno aki les dejo mi correo para todos [email protected] bye

  6. me gusta esa lecion

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